Las famosas y deliciosas gomitas en forma de «panditas» u «ositos» (gummy bears) llevan casi 100 años en el mercado de las golosinas, pero, ¿conoces su historia?
Aunque en México tenemos nuestra propia versión y marca; las gomitas con esta forma no fueron inventadas en nuestro país.
El origen de los llamados gummy bears o «panditas», se remonta al año de 1920 en la ciudad alemana de Bonn.
Cuando el pastelero Hans Riegel registró la empresa de dulces Haribo, acrónimo de su nombre y la ciudad, jamás imaginó que se convertiría en una de las empresas dulceras más reconocidas y exitosas del mundo.
Riegel comenzó realizando dulces duros e incoloros usando una tetera de cobre y losa de mármol en su cocina, y dos años más tarde, inventó los «dancing bears», las tiernas y afamadas golosinas; inspirándose en los osos amaestrados que aparecían en los desfiles de la ciudad.
Los productos Haribo eran entregados en bicicleta por su esposa Gertrud Riegel, hasta 1923, cuando gracias a la demanda de los dulces pudieron invertir en un automóvil con carteles publicitarios.
En 1960 se rediseñan los dancing bears y nacen los ahora mundialmente conocidos Haribo Goldbears; cada bolsa con cinco sabores distintos (limón, naranja, piña, frambuesa y fresa).
El éxito de este producto fue tan grande, que en el año 1967, la Oficina de Patentes de Alemania reconoce oficialmente a HARIBO Goldbears como una marca registrada.
Imágen: Haribo
El empaque y el amado Goldbear, ha ido cambiando a lo largo de los años hasta llegar al diseño que conocemos ahora.
Actualmente, Haribo tiene una gran variedad de golosinas y producen al rededor de 100 millones de sus Goldbears originales al día.
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