Mucho después de su muerte, en 1954, la artista Frida Kahlo sigue siendo un nombre familiar. Sus intrigantes y ahora icónicas pinturas y su estilo personal han perdurado a través de los años. Al igual que su arte, su ropa estaba llena de color y tenía una riqueza visual que permanece en boga perpetuamente.
Kahlo usó la moda para darse fuerza emocional y superar sus desafíos físicos. Cuando solo tenía 18 años, tuvo un accidente de autobús casi fatal del que tardó dos años en recuperarse y que le causaría dolor por el resto de su vida.
A pesar de esta dificultad, transformó objetos relacionados con la medicina en obras de arte portátiles. Uno fue un molde de cuerpo completo que usó después del accidente, que pintó y transformó en una escultura móvil. Otro era un miembro protésico. Después de que le amputaron la pierna en 1953, convirtió la extremidad artificial en un objeto espectacular que se completó con una bota roja con cordones y una campana.
Después de la muerte de Kahlo, su esposo Diego Rivera selló sus pertenencias en el baño de su casa en la Ciudad de México. Afligido, dijo que los mantuvieran ocultos hasta 15 años después de su muerte. Murió en 1957, pero los artículos permanecieron guardados durante 50 años. No fue sino hasta 2004 que el Museo Frida Kahlo decidió catalogarlos.
El fotógrafo japonés Ishiuchi Miyako tuvo el honor de documentar el armario improvisado de Frida Kahlo. Usando una cámara de 35 mm y luz natural, fotografió más de 300 artículos nunca antes vistos. Esto culminó en un libro llamado Frida por Ishiuchi que ahora está disponible a través de Amazon.
Las pinturas y el estilo personal de la artista Frida Kahlo siguen siendo una inspiración hoy.
Ella utilizó la moda y el arte combinados como una forma de hacer frente a los desafíos físicos que la afectaron en el transcurso de su vida.
Vía: My ModernMet
TE PUEDE INTERESAR:
Björk y Microsoft usan IA para crear música que cambia con el clima
No Comments